viernes, 28 de marzo de 2014

CULTURA

CULTURA

El Royal Exhibition Building en Melbourne fue el primer edificio de Australia en ser declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco (organización de las Naciones Unidas para la educación, la ciencia, y la cultura), en 2004.

La base primaria de la cultura australiana fue anglocéltica hasta mediados del siglo XX, aunque los rasgos característicos australianos habían ido adquiriéndose del entorno y de la cultura aborigen. Durante los últimos 50 años, la cultura australiana ha estado fuertemente influida por la cultura popular estadounidense (particularmente en televisión y cine), por la inmigración a gran escala de países no anglohablantes y por los países asiáticos vecinos. El vigor y la originalidad de las artes australianas ― películas, ópera, música, pintura, teatro, danzas y artes manuales ― han alcanzado reconocimiento internacional.

Australia tiene una larga historia en lo referente a las artes visuales que comienza con las pinturas rupestres realizadas por los indígenas. Desde los tiempos del asentamiento europeo el paisaje australiano ha sido un tema común en el arte nacional, lo cual se hace evidente en los trabajos de Arthur Streeton, Arthur Boyd y Albert Namatjira, entre otros. Las tradiciones de los aborígenes son transmitidas mayoritariamente en forma oral (tradición oral) y están muy relacionadas con ceremonias y con historias sobre el tiempo de sueños. La música, danzas y arte de los aborígenes australianos tienen una notable influencia en la artes escénicas y visuales de la Australia contemporánea. La nación posee una activa tradición de música, ballet y teatro; muchas de las compañías de artes escénicas reciben fondos públicos a través del Consejo de Australia para las Artes. Existe una orquesta en cada ciudad capital, y una compañía de ópera nacional, la Ópera de Australia, que adquirió importancia gracias a la cantante de ópera Dame Joan Sutherland; la música de Australia incluye la música clásica, el jazz y muchos otros géneros de música popular. La principal representante de la música popular australiana es la cantante Kylie Minogue, reconocida por su notorio éxito mundial Can´t Get You Out Of My Head, además de su aclamada participación en los juegos olímpicos de Sydney 2000.

La literatura de Australia también ha estado influida por el paisaje; por ejemplo, en trabajos de escritores tales como Banjo Paterson y Henry Lawson. El carácter de la Australia colonial, reafirmado en la literatura del país, repercutió mucho en la etapa moderna de la nación y se destacó por su igualitarismo y anti-autoritarismo. En 1973 Patrick White fue premiado con el Premio Nobel de Literatura, convirtiéndose en el único australiano en recibir esta condecoración; es reconocido como uno de los más grandes escritores en lengua inglesa del siglo XX. El inglés australiano es una variedad mayor del inglés; su gramática y ortografía están en su mayor parte basadas en el inglés británico, con frases y expresiones propias de un rico lenguaje vernáculo y un léxico único.


Australia tiene dos compañías emisoras públicas nacionales (la ABC y la SBS), tres redes televisivas comerciales, tres servicios de televisión de pago, y numerosos canales de televisión y estaciones de radio públicos. El cine de Australia ha alcanzado éxito comercial y crítico. Cada ciudad importante tiene sus propios periódicos de publicación diaria; existen también dos periódicos diarios nacionales: The Australian y The Australian Financial Review. Según Reporteros Sin Fronteras, en 2005 la Mancomunidad se encontraba en el puesto número 31 en el mundo en lo referente a libertad de prensa, situándose en esta lista por debajo de Nueva Zelanda (9º lugar) y el Reino Unido (28º lugar), pero por encima de los Estados Unidos. El hecho de que ocupe ese puesto, no muy alto, se debe principalmente a la limitada diversidad en la propiedad de medios de comunicación. La mayor parte de los medios impresos está bajo el control de la News Corporation, o bien de John Fairfax Holdings.

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